“Las mayores soluciones para mejorar el bienestar están fuera del sistema sanitario”
Según ha explicado Cofiño, “no es casualidad” que una población sufra de una determinada dolencia o de un mal. Todo eso responde al “contexto socioeconómico del paciente”. El médico ha ofrecido algunos datos que muestran el peso que tienen diferentes factores en el bienestar. Según éstos, la “calidad del sistema sanitario” tiene un peso tan solo en el 10% de la solución al problema del paciente mientras que el 40% depende de las “conductas” del individuo; otro 40% de “factores socioeconómicos” y un 10% del “medioambiente”. Por lo tanto, “nos encontramos con la realidad de que los factores que determinan el bienestar de la población se encuentran fuera del sistema sanitario”.
En la sesión el médico ha afirmado que “se debe cambiar la forma en la que se enfocan muchos problemas sanitarios”, ya que “muchas veces se ofrece asistencia sanitaria en vez de solucionar los determinantes” que originan el problema. Para ilustrar lo explicado, el médico ha puesto el ejemplo de la gestión que se lleva a cabo con el virus VIH. “Muchas personas adquieren el VIH por dificultades para acceder a los preservativos, por falta de educación sexual, por falta de pensamiento crítico, etc. Y sin embargo, los medios que se utilizan para combatir el virus están mucho más enfocados en la asistencia de los afectados. Es decir, "en vez de actuar combatiendo los determinantes, asistimos solamente a los afectados”.
Por lo tanto, el abordaje que debe ofrecerse debe tener una cobertura “multinivel” que, según Cofiño debe incluir una dimensión social y psicológica que resuelva los determinantes, es decir, el origen. “También es importante ayudar a los pacientes con equidad y de forma justa. No es lo mismo ayudar a un adulto que a un joven. Cada uno tiene unas limitaciones socioculturales”. Tampoco se puede culpabilizar al paciente de su estado de salud ya que muchas veces los individuos tienen barreras socioeconómicas y culturales como la desigualdad de género o la clase social. “Al final se trata de trabajar conjuntamente para favorecer el bienestar de los pacientes que más determinantes tienen y que todos aprendamos en el proceso”.
El médico ha recalcado que para lograr un servicio integral se debe involucrar a asociaciones de vecinos, instituciones políticas, organizaciones, etc. para “aunar fuerzas” y lograr que las demandas de los ciudadanos sean escuchadas. “Lo que no puede ser es que cada cuatro años las instituciones cambien de programas de salud. Tenemos que tener una clara visión de lo que debemos hacer, y remar todos en la misma dirección”.
Confiño ha mostrado el ejemplo de Asturias, territorio en el que se han creado algunos consejos de salud en los cuales “los ciudadanos toman parte activa en su salud. Estos consejos sirven de herramienta de socialización y de empoderamiento ciudadano. Para concluir, el médico ha añadido que se debe solucionar el problema de raíz porque “de poco sirve medicarse si los factores que generan el problema siguen existiendo”.