Surfrider
Surfrider España es la delegación española de la ONG Surfrider Foundation Europe. Cuando comenzó Surfrider Europe en 1990, eran un grupo de surfistas preocupados por la salud de nuestro entorno. Hoy en día son expertos en el campo de la protección de los océanos; abordan la problemática la basura marina y la contaminación plástica, la calidad del agua y la salud pública, el cambio climático y la gestión del litoral. A través de una red de más de 50 grupos locales de voluntarios en comunidades costeras y ciudades de toda Europa, educan, sensibilizan y organizan acciones sobre el terreno.
Los retos actuales que tienen entre manos están relacionados con la protección de nuestra costa y océanos. Llevamos décadas sin tener en cuenta el impacto que causamos a nuestro planeta, y conseguir el cambio de hábitos es muy complejo. Empoderan a ciudadanos y especialistas para promover la investigación científica e influir en una legislación que coloque la protección de los océanos en el centro del debate político.
Opinan que es importante conseguir esos cambios a varios niveles: tanto individual (como ciudadano/a) como a nivel institucional (las empresas y gobiernos deben mejorar sus prácticas y gestión).
Principales preocupaciones
Sus principales preocupaciones son que ese cambio de hábitos que necesitamos como sociedad no llegue a tiempo. Los ecosistemas tienen un punto de no retorno, y algunos impactos antrópicos pueden tener consecuencias inimaginables, como aquellas causadas por el cambio climático. Aún así, están seguros de que el cambio es posible. Por ejemplo, hoy se habla mucho más de ciertos temas que antes eran desconocidos, como las basuras marinas.
Iniciativas que ya están en marcha y nuevas iniciativas
Para empezar, fomentan la creación de grupos locales (https://volunteers.surfrider.eu/es/become-a-volunteer-es/) para que las personas puedan agruparse en su ciudad o entorno y desarrollar las iniciativas que crean interesantes. Añaden que es muy bonito ver como los voluntarios idean sus propios proyectos y campañas.
Aparte de esto, tienen varios proyectos muy interesantes que están en marcha. Para empezar, cuentan con un programa de voluntariado ambiental desde el cual cualquier persona puede organizar o unirse a una recogida de basura marina (https://www.initiativesoceanes.org/es/). Además, trabajan con la Universidad de Barcelona para conseguir datos de contaminación de basura (en concreto de microplásticos) a través del paddle surf y pronto este proyecto llegará a Euskadi (https://www.asensiocom.com/surfingforscience/es/).
En Gipuzkoa tienen en marcha un proyecto con la Diputación Foral de Gipuzkoa llamado “La Costa y Tú”. Desde hace más de 6 años, visitan varios centros educativos y colaboran con voluntarios y voluntarias de Euskadi: Zumaiena Ikastetxea, BHI Mutriku y el colectivo de la tercera edad Nagusilan en Mutriku. Con ellos hacen recogidas de basura en Zumaia y Mutriku en las playas de Burumendi e Inpernupe. Además muestrean con un protocolo científico las playas de Orrua, Murgita y Alkolea. Esos datos los transmiten a la Diputación para que tengan constancia de los residuos encontrados y su tipología. A final de año además celebran el Día de Voluntario presentando los datos de las recogidas hechas con ellos y analizan lo que han encontrado, agradeciéndoles su esfuerzo. En ese proyecto además han creado una exposición fotográfica que llevan a los centros o escuelas que estén interesados y un clip de vídeo de la experiencia del año pasado: https://www.youtube.com/watch?v=e3tPzsJcp98&t=5s&ab_channel=SurfriderEspa%C3%B1a
El 28 de mayo organizan una recogida en las marismas de Txingudi, abierta a todo el público y a principios de junio estarán en Bioterra con talleres sobre residuos. Se puede pedirles más información escribiendo a voluntariado@surfrider.eu
Por otra parte, tienen un programa OceanFriendly Restaurants, para identificar restaurantes que son sostenibles con el océano (https://surfrider.eu/en/our-missions/marine-litter/ocean-friendly-restaurants-70182.html) con un mapa para ver los restaurantes a los que sus voluntarios y voluntarias han entregado el sello.
Además, van a organizar varias acciones en humedales, ríos y playas de Euskadi a lo largo del año, por lo que la gente puede escribir a voluntariado@surfrider.eu para saber más. Enfatizan en que son muchos los proyectos y herramientas que tienen.
Voluntariado, cooperación y la importancia de tejer redes.
Destacan que establecer una comunidad bien conectada es clave. Es sin duda, clave para una victoria. Si vans solos, no llegans tan lejos. Quizás es por esto que su comunidad ha ido creciendo en los últimos años hasta llegar a países donde no tenían oficinas. Miles de voluntarios se reúnen cada año e idean campañas para educar, hacer incidencia u obtener datos de contaminación. Pero no solo eso: un ejemplo muy bonito es el del programa CoastalDefenders: donde voluntarios que han denunciado una irregularidad ambiental han trabajado con ellos para encontrar una solución, a nivel legal inclusive si era necesario. Esto solo se consigue tejiendo una buena conexión entre todos los agentes y fomentado el trabajo colaborativo.
En Barcelona el proyecto SurfingforScience nació como una idea del grupo local de Barcelona al reunirse con la Universidad de Barcelona, ¡y hoy ese proyecto sigue creciendo y expandiéndose!
El papel que la sensibilización y la educación ambiental juegan en vuestro actuar.
Para Surfrider la educación ambiental es clave. Es lo que permite conectar la ciencia y las temáticas complejas con los ciudadanos. Gracias por ejemplo a la ciencia ciudadana, educan sobre las problemáticas principales del océano y consiguen que los ciudadanos y ciudadanas aprendan a utilizar un protocolo de ciencia ciudadana para caracterizar los residuos, por ejemplo. Sus proyectos o campañas casi siempre son transversales, y tienen la educación como algo básico, la raíz. La educación permite empoderar a los ciudadanos y que estos les transmitan sus inquietudes, pero también que se agrupen y que se activen para buscar soluciones. Es también necesaria para influir en las futuras generaciones.
¿Qué es lo destacaríais de vuestra trayectoria?
Haber conseguido tener presencia en países donde no tenemos oficinas (actualmente estamos en 12 países a nivel europeo), muestra que la comunidad Surfrider es importante y que el trabajo entre los expertos, voluntarios y todos los agentes es clave. Por ejemplo, con el programa de voluntariado ambiental OceanInitiatives, han conseguido datos de contaminación de basura marina a nivel europeo, los cuales han trasladado a la Agencia Europea del Medio Ambiente.
Gracias al trabajo conjunto y a la colaboración con otras entidades, han conseguido victorias tanto a nivel europeo como a nivel estatal. A nivel europeo, por ejemplo, consiguieron que en la Directiva Europea de plásticos de un solo uso (Single Use Plastic) exigiese a los estados miembro buscar alternativas a ítems de un solo uso, obligando a cada país a legislar sobre ello (aunque en el estado español vamos algo tarde en esa transposición de la directiva y siempre se pueden mejorar cosas). En el estado español han conseguido junto al trabajo que hacen con la coaliciónAliança Mar Blava, que no se permitan nuevos permisos para prospecciones de petróleo/gas en todo el estado. Subrayan que esto es un hito muy reciente, y no es algo que esté pasando en todos los países.
Mirada a futuro
En sus organizaciones se produce una paradoja: lo ideal sería que no existieran, porque significaría que no existen problemáticas como el cambio climático o la contaminación plástica. Pero no es así. De todas formas, esperan que en los próximos años esta tendencia a preocuparnos más por nuestro planeta aumente. No es fácil cambiar los hábitos después de tanto tiempo, pero destacan que tenemos que poner todos de nuestra parte para ello. Imaginan una ciudadanía empoderada y que exige a sus gobernantes mejores medidas. Imaginan unas empresas que entienden el impacto que pueden tener y deciden adoptar esas mejores medidas también. En definitiva, que la salud de nuestro entorno y nuestros océanos mejora.