Los Cursos de Verano de la UPV/EHU salen reforzados de la pandemia
En su 40 edición, los Cursos de Verano de la UPV/EHU recuperan el número de participantes pre pandemia y se abren a un público más internacional.
El inicio de la 40º edición de los Cursos de Verano coincidió con la cuarta ola de la pandemia, y fue durante los meses de julio y agosto, en plena quinta ola, cuando alcanzamos el pico de actividad. En este contexto se ha alcanzado un número de asistentes casi a nivel pre pandémico. A falta de computar algunos Cursos que aún se celebran durante esta semana y la primera de octubre, se prevé cerrar con la participación de 12.704 personas, frente a las 13.412 de la edición del 2019.
La edición se ha desarrollado sin ningún incidente sanitario gracias a las medidas implementadas y el respaldo de las direcciones, ponentes y alumnado de los distintos Cursos, a los que queremos agradecer su colaboración. Esta experiencia ha servido precisamente para recuperar la presencialidad al tiempo que se ha consolidado la oferta online en directo, gracias a la cual se ha incorporado alumnado proveniente de numerosos países extranjeros. Casi 1.000 personas se han matriculado desde México, Brasil, Argentina o Colombia y si hablamos de Europa, mayoritariamente llegaban desde Alemania, Italia y Francia. Los cursos online han acercado a estudiantes de todos los continentes, incluida Australia.
“Reaprender” como dice nuestro lema 2021, ha sido la música de fondo que ha sonado en los Cursos de Verano y que nos ha permitido recuperar el compás previo a la pandemia. En torno a 7 retos sociales se ha articulado esta edición, retos que hemos visto que respondían efectivamente a la actualidad y a los dilemas que plantea nuestro futuro inmediato pos pandemia. Es de destacar la transversalidad de muchas de las ideas y propuestas que se han ido exponiendo en los Cursos de Verano.
El Donostia Sustainability Forum, DSF, concentró los 33 Cursos que en torno a la sostenibilidad se han celebrado. Sostenibilidad medioambiental, social y económica. Los Cursos celebrados han tratado de dar respuestas a las principales preguntas en la materia; ¿son las pymes el eslabón perdido en la transformación empresarial?, en la lucha contra el cambio climático ¿lo estamos haciendo todo bien?, ¿nos estamos olvidando del papel de la ganadería?, ¿a qué velocidad pueden crecer las energías renovables para que el hidrógeno verde no sea una realidad residual? A mitad del verano llegó el último y contundente informe del IPCC y se planteaba que no es bueno crear “ecoansiedad” porque nos paraliza, pero “tenemos que actuar rápido porque cada grado cuenta”: nos decía Mikel González-Eguino, del Basque Center for Clime Change.
En este segundo verano pandémico, el Catedrático de Salud Pública Antoni Trilla nos advirtió en la apertura académica de los Cursos de Verano que “esto no ha terminado”. A lo largo de las distintas citas del programa que se centraron en la pandemia supimos que la sociedad, al menos la mitad de su población, ha tenido o tiene sentimientos de inseguridad y ansiedad. La Diputación Foral de Gipuzkoa constató las crisis sanitaria, social y económica. La directora técnica de la Unidad de Crisis de Barcelona UTCCB intentando construir resiliencias nos advirtió que lo que ”no vale es decir que seguimos adelante y aquí no ha pasado nada” porque tenemos heridas psicológicas que tienen que cicatrizar. Con el Colegio de Enfermería de Gipuzkoa nos “paramos a pensar” que igual no habíamos aprendido nada para la siguiente pandemia.
La estrategia de digitalización constituye el segundo reto en los planes de recuperación de la Unión Europea de la que hemos hablado largo y tendido este verano. La digitalización ha sido una de las palabras más conjugadas hablando tanto de crisis climática, de educación, de justicia, de comercio local, de movilidad o de gobernanza (otros de nuestros retos). Mientras Europa ha puesto en marcha la “Conferencia sobre el Futuro de Europa” dirigida a la ciudadanía en un intento de neutralizar la gran distancia que siente hacia sus instituciones, poniendo en valor el principio de subsidiariedad y las administraciones cercanas, los Cursos de Verano analizaron la experiencia de la gobernanza publica comunitaria en Errenteria; la vida y los valores comunitarios en las zonas rurales se examinaron en Zerain; organizado por el Ararteko, se hizo un repaso del fenómeno de falta de transparencia de las administraciones y se constataron las negativas percepciones de la sociedad en tiempos de pandemia respecto a los distintos niveles de gobierno. Las relaciones online con la administración en general, han supuesto un hándicap añadido para las personas mayores, pero también a la ciudadanía en general dado que el diseño de la mayoría de los servicios está “lleno de trampas técnicas”.
El envejecimiento de la población sigue demandando nuestra atención. Los cuidados de larga duración, el sentido y la transcendencia de la vejez, una sociedad que ponga el cuidado de la vida en el centro (Emakunde), la necesaria transformación de los centros para mayores (antes clubs de jubilados) y las evidentes deficiencias en el diseño de los entornos para envejecer tal y como quedó de manifiesto en un Curso organizado por la Fundación Matia. Todos estos aspectos han sido temas a debate este verano.
La transformación digital de la educación ya iniciada hace años según pueden constatar los Cursos de Verano se ha acelerado en estas dos últimas ediciones. El mundo educativo tiene también aproximaciones recurrentes a la enseñanza fuera del aula o la enseñanza en la naturaleza, sin abandonar la vigilancia de la igualdad y el buen trato ya desde la escuela en la primera infancia. En esta edición, formación dual y la educación en valores de la Formación Profesional de alto rendimiento que tanto se han venido significando en Euskadi, tuvieron también nuevos repasos.
Desde nuestro compromiso con la igualdad de género, tuvimos un Curso de Verano que pisó sobre el suelo más crudo de la prostitución, sus mentiras y realidades. En otro dirigimos la mirada a los cambios legislativos en la violencia de género, donde un grupo de magistradas expresaban su impotencia ante casos que se repiten en el tiempo y las trabas que suponen en muchos casos la voluntad auto limitada de las víctimas para acabar con sus agresores en la cárcel. También se ha tratado el tema de mujeres y niños víctimas de violencia ejercida desde las redes sociales y que se ha multiplicado exponencialmente durante la pandemia.
Este año hemos hecho un gran tour por la cultura vasca. Comenzamos los Cursos estivales con un viaje iniciático a la Costa Rocosa y la última obra escultórica de Cristina Iglesias “Hondalea” para saltar a tierra en la 1ªEscuela de Eduardo Chillida pero, después de hacer un largo viaje por el Camino de Santiago del norte, viajar en el tiempo también a la vieja Vasconia que conoció Juan Sebastián Elkano cuando marchó a por especias y terminó dando la vuelta al mundo. Finalizando con un Curso dedicado a lo que se entiende como la actual política o diplomacia cultural “Public diplomacy & cultural diplomacy. Basque Public Diplomacy” con una nutrida representación de las y los conocidos embajadores vascos de Reno (USA).
Esta edición ha destacado por su oferta en euskara y sobre el euskara. La temporada arrancó con un Curso de Verano de gran afluencia de público sobre los límites del euskara en la antigua Vasconia, y ha contado con otros dos Cursos de gran impacto, sobre la Ley Molac de inmersión lingüística en Francia, en el que contamos con el propio Diputado bretón, Paul Molac, y su propuesta de reformar la Constitución gala, y un segundo sobre la obra de Karmele Jaio en el que la propia autora debatió las claves de su literatura con las asistentes al Curso.
La arquitecta Franziska Marie Ullman, pionera en arquitectura y género, el biólogo marino y oceanógrafo Carlos Duarte; el presidente y el secretario de la Sociedad Mundial de Victimología; Carlos Briones del Centro de astrobiología del CSIC: María Ángeles Durán; la catedrática de ética Adela Cortina; Txetxu Ausín experto en cuestiones de ética e Inteligencia Artificial; el creador del concepto hoy tan en boga “ecoansiedad” Andreu Escrivá; o el experto en nutrición y autor del libro “¿Qué Comes?” Miguel Ángel Martinez son algunas de las personalidades que han llenado los Cursos de Verano de sabiduría.
Las 12.704 personas implicadas en los Cursos de Verano de 2021 han asistido a alguna o algunas de las 192 actividades organizadas. 44 se han desarrollado en euskera y geográficamente- aunque casi en todas se han ofrecido también con la opción de participar online en directo- 104 se han celebrado en Gipuzkoa, 20 en Bizkaia, 5 en Araba, 2 en Navarra y 2 en Iparralde. 18 Cursos que se han ofrecido únicamente online en directo y 41 son los Cursos online de larga duración. Además de han organizado 13 Actividades Abiertas al público gratuitas con una alta participación.
Todavía esta semana se celebran los últimos Cursos que nos llevarán a Elizondo y Ordizia. Y la Fundación sigue fiel a su misión con los Cursos online de larga duración y la programación de todo el año que se desarrolla en el marco del Donostia Sustainability Forum. Y ya empieza la máquina a rodar para preparar una nueva edición en 2022, el 2 de noviembre se abrirá el plazo para recibir propuestas para la nueva edición de los Cursos de Verano.
Todo esto no sería posible sin el apoyo incondicional que han demostrado las instituciones que conforman el Comité Organizador de los Cursos de Verano: la Fundación BBVA, el Ayuntamiento de Donostia, la Diputación Foral de Gipuzkoa y el Gobierno Vasco. Y por supuesto, gracias a las y los directores y ponentes de los Cursos, las entidades que colaboran haciendo posible cada actividad y al alumnado, fiel a su cita anual. Y a los medios de comunicación, que contribuyen a que las reflexiones y aprendizajes de los Cursos de Verano se divulguen más allá de las propias aulas.
ESKERRIK ASKO GUZTIOI!
