Acuicultura sostenible con nuevas especies de peces en Euskadi: el muble o korkon / Las energías marinas, retos hacia la transición energética

MANU SOTO

La creciente demanda alimentaria actual requiere de nuevos enfoques. La acuicultura complementa a la pesca y se orienta hacia un crecimiento sostenible donde nuevas especies formen parte de nuestro ecosistema para hacer frente a los nuevos retos a los que nos enfrentamos.

La acuicultura y la pesca son dos actividades complementarias que deben afrontar la creciente demanda alimentaria actual. No obstante, la situación de ambas actividades es diferente, ya que mientras los retos de la acuicultura se orientan hacia el crecimiento sostenible y hacia la consolidación como actividad con una excelente proyección de futuro para la alimentación de las personas, la pesca, a veces, debe estar por debajo de un techo de producción temporalmente superado. Para que la acuicultura se convierta en una línea estratégica fundamental de la alimentación sostenible, hay que renovar la investigación e invertir en ella, para elaborar más productos y crear actividades económicas y empleo nuevo. En Euskadi diferentes instituciones han estado trabajando juntas durante los últimos años para desarrollar un sistema sostenible de cría de mubles, analizando desde el cierre del ciclo vital hasta determinar las condiciones óptimas para su cultivo. Es una actividad prometedora que puede tener retorno en breve plazo.

JON LEKUBE

El desarrollo de las energías renovables será imprescindible en las próximas décadas por dos razones fundamentales: el cambio climático y la dependencia energética. En este camino será imprescindible el esfuerzo por explotar nuevas fuentes de energía, y en este contexto se espera que las energías marinas jueguen un papel importante. Para ello será necesario no sólo desarrollar plenamente la tecnología disponible en la actualidad, sino también prestar atención a otros aspectos importantes como el impacto medioambiental, la planificación y ordenación del medio marino para nuevos usos, la creación de nuevas infraestructuras y puestos de trabajo… Poder dar una respuesta adecuada a todos estos retos en los próximos años es actualmente uno de los principales objetivos del sector de las energías marinas.